El análisis del portafolio tecnológico es una herramienta de gestión útil para la identificación y evaluación de tecnologías en el ámbito interno de la organización, al permitir analizar y priorizar sus proyectos y/o innovaciones tecnológicas estratégicas respecto a la optimización de la relación entre el máximo rendimiento y el mínimo riesgo.

Existen múltiples metodologías de gestión. En esencia, deben ser capaces de identificar los productos o sistemas tecnológicos básicos, centrales y derivados de la organización, prestando especial atención a elementos como: capacidades, estado de madurez o TRL, activos intangibles como los registros de propiedad intelectual, la inversión requerida, las tecnologías potencialmente sustitutivas, sus tendencias y los beneficios previsibles. Para ello, la inteligencia tecnológica juega un papel esencial, especialmente el aprovechamiento informativo de sus productos e informes.

En general, este tipo de procesos de planificación estratégica permiten obtener como resultados matrices de decisión. Éstas ayudan a evaluar diferentes alternativas de actuación para seleccionar de manera ponderada aquella con mayor garantía de éxito. Además, ofrecen sus resultados de una manera visual, a través de gráficas y tablas con esas opciones comparadas.

Más información: García & Verlasco, 2008